Uno de los objetivos de la anestesia es evitar el dolor tanto durante la cirugía, como en el periodo postoperatorio, así como en otros procedimientos terapéuticos. El médico anestesiólogo será el encargado de administrar una serie de fármacos para conseguir este objetivo.
Según su estado de salud, tipo de operación y preferencias de tratamiento, se le aplicacará uno de estos cuatro tipos de anestesia.